“Compañeros
hay muchos, verdaderos amigos solo son unos pocos”. (Steven
Santana)
Quería
empezar hoy con esta frase, para mi muy certera sobre la amistad.
Creo que a lo largo de nuestra vida, nos cruzamos con muchas personas
en el camino, los cuales confundimos llamándoles amig@s, cuando realmente deberíamos llamarles compañeros, compañeros de
viaje, pues al final aparecen y desaparecen.
Igual
de rápido que llegaron, se van...
Por
eso no se les puede llamar amigos... aunque hayan compartido contigo
muchos momentos, un amigo es algo más...
La
amistad no se pide, se da. Además tiene que ser recíproco.
Hace
unos días tuve la suerte de volver a reencontrarme con unas amigas
de toda la vida. Sí, amigas...
Hacía
por lo menos 10 años que no hablabamos y en 5 minutos parecia que no
nos habiamos separado nunca... todo seguía igual. Y ¿te acuerdas
cuando esto? ¿y lo otro?. Amigas con las que he reido, llorado, me
he confesado, he pedido consejos.... esas cosas no se pueden ni deben
borrarse, ni aunque pasen mil millones de años. Para mí han sido
por lo menos una de ellas como mi hermana. Para mi eso es la amistad,
las amigas verdaderas.... esas que después de mucho tiempo no te
piden explicaciones de nada, han confiado y siguen confiando en ti,
no te reprochan nada, no tienen rencor, te quieren tal y como eres y
cuando las miras a la cara ves el amor que te tienen, que te siguen
queriendo como antes, como siempre. Volvimos a reir como niñas
recordando miles de cosas. !Hemos pasado tanto juntas...!!!
La
cosa es que simplemente la vida te hace llegar a no verte con una
persona aunque vivas al lado, pero cuando la amistad es verdadera, la
vida te vuelve a poner a esa persona en tu camino. Por eso también
uno sabe cuando la amistad es verdadera o no. Los compañeros solo
pasan una vez por tu vida, pero los amigos pasan muchas veces, por
suerte...
Bueno, pues pasé uno de los ratos mas felices de mi vida. Lo necesitaba,
además ya llevaba tiempo dandole vueltas para intentar verlas,
hablar con ellas, ver que todo seguía igual y así fué. Todo seguía
igual. Paramos el tiempo para volver a ponerlo en marcha, eso sí,
actualizandonos y prometiendonos que no volvería a pasar esto.
Empezar a vernos con más frecuencia, pues yo por lo menos las
necesito. Siempre las he necesitado y aunque soy una persona muy
querida por mi marido, familia, etc. como el amor incondicional que
te dan tus amigas, eso, no tiene precio.
Desde
aquí, les dedico estas palabras y decirles que espero vivir con
ellas más experiencias todavía (que nos faltan muchas) , que nunca
se vuelvan a marchar de mi lado tanto tiempo y que las quiero un
mónton. Ellas lo saben y yo lo sé, por eso también me siento tan
feliz.... se que las tengo a mi lado y espero tenerlas por mucho,
mucho tiempo.
Continuará.....
Eres verdaderamente afortunada por tener gente así, en tu vida. Me alegro, cuidalas y de vez en cuando riegalas . Las amistades deben cultivarse y cuidarse. Te lo dice una mala jardinera
ResponderEliminarGracias, jardinera pero no creo que seas mala, sino que la vida da muchas vueltas. Seguro que tu también, por tu parte eres afortunada. De eso no me cabe duda. Y ten por seguro, que esta vez las riego. Gracias por seguir mi blog. Un abrazo muy grande.
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